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viernes, 24 de julio de 2015

Juguetes Marklin para el mercado español.

El control de una gran parte del mercado internacional de juguetes de calidad por la casa alemana Marklin, hizo que no se
olvidara del mercado español, como podemos ver en este tranvía muy de principios del S. XX, en que las inscripciones no
dejan lugar a dudas sobre el publico a que estaba destinado. Funciona a resorte, y pertenece a la excepcional colección de
mi querido amigo y compadre Gilles Hervé de París.

Coche restaurante Marklin, 1918. Observese la cartela lateral Madrid-Jrun, con j, lo que indica claramente que en Alemania no tenían ni idea que era ni donde estaba Irun. El interior con todo tipo de detalles: cocina, cocinero, mesa, clientes y demás. Una maravilla que todavía hace soñar.

Coche butacas, de similar época que el anterior. En este caso las cartelas indican Malaga Madrid, pero el Fumare-Non Fumare significa que o bien aprovechaban las italianas, o no conocian bien el español. O las dos cosas.
Esto dos modelos pertenecen a la nunca demasiado ponderada colección del Museo del Traje en Madrid.

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